Al menos 749 personas han sido detenidas en Venezuela en las últimas horas, cuando se suscitaron numerosas protestas en varias regiones del país, de miles de ciudadanos en contra del resultado electoral y luego de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) declaró a Nicolás Maduro, en el poder desde 2013, como presidente reelecto.
El fiscal general, Tarek William Saab, ofreció este martes un balance sobre la actuación de los cuerpos de seguridad en el marco de estas manifestaciones, que se saldaron también con 48 policías y militares heridos, así como con la muerte de un miembro de la Fuerza Armada «producto de los disparos ocasionados por estos manifestantes» en el estado Aragua (norte).
Saab no habló sobre las lesiones sufridas por los manifestantes, quienes fueron repelidos con gases lacrimógenos y perdigones usados por la fuerza pública, según constató EFE en Caracas.
A su juicio, los manifestantes detenidos son «delincuentes» que no participaron en protestas pacíficas sino que generaron violencia, por lo que están siendo acusados de delitos como instigación pública, obstrucción de vías públicas, instigación al odio, resistencia a la autoridad y, «en los casos más graves, terrorismo».
Algunas de estas personas -prosiguió- están vinculadas con casos como el ataque a alcaldías gobernadas por el chavismo, de una oficina del Consejo Nacional Electoral o por violentar el patrimonio, entre otras cosas, porque los manifestantes derribaron varias estatuas del fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013).
Este lunes, Maduro denunció que está en marcha un intento de golpe de Estado «de carácter fascista», en vista de los cuestionamientos a su reelección, que fue rechazada por la oposición mayoritaria y buena parte de la comunidad internacional.
La principal coalición opositora, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), aseguró que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó la Presidencia con un amplio margen y creó una página web en la que subió el 73 % de las actas electorales para reforzar su reivindicación.