En Italia se registró 26 nuevos fallecimientos en las últimas horas, con un total de 34,371 muertes por el Covid-19, además de 303 nuevos casos confirmados, elevandose a 237, 290 personas contagiadas desde que inició la pandemia.
En Italia hay actualmente 25.909 personas enfermas con la COVID-19, de las que la gran mayoría (22.213) están aisladas en sus domicilios con síntomas débiles o sin ellos; 3.489 hospitalizadas, y 207 reciben cuidados intensivos, dos menos que el domingo.
En la región del Lacio (centro) se registró el mínimo histórico con solo tres contagios, uno en la capital, Roma, y se declararon bajo control los focos del hospital San Raffaele Pisana y del edificio ocupado del barrio de la Garbatella.
Italia inició su confinamiento el pasado 9 de marzo y el 4 de mayo comenzó su desescalada.
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Este lunes ha comenzado la fase 3, con la apertura de cines y teatros, uno de los pocos sectores que seguían suspendidos, así como los parques y campamentos para niños, aunque se han retrasado al 25 de junio los deportes en grupo y al 14 de julio las discotecas.
Estas nuevas aperturas llegan con las preceptivas medidas de seguridad para evitar contagios, como la distancia entre personas y la consecuente reducción de aforos, algo que preocupa sobremanera a los gestores de teatros y salas cinematográficas.
Entretanto, el Gobierno sigue con sus “Estados Generales para la Economía”, un encuentro con las partes sociales, instituciones y prestigiosos economistas en el que se pretende elaborar un plan de recuperación para el país tras la crisis del coronavirus.
Hoy fue el turno dedicado a los sindicatos, que llevaron sus propuestas y reivindicaciones.
En el encuentro no participa la oposición de derechas, formada por la conservadora Forza Italia de Silvio Berlusconi y las ultraderechistas Liga, de Matteo Salvini, y Hermanos de Italia.
